Ventajas e Inconvenientes de las TIC

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Reflexión personal:

Vamos a ahondar ahora en la conclusión que hemos expuesto dentro de la presentación disponible en EMaze.

Personalmente, llevo utilizando el ordenador desde que tengo 5 años. A los 7 ya sabía escribir en teclado con relativa fluidez, y llevo desde los 6 jugando a videojuegos, a través del ordenador o a través de diferentes plataformas de entretenimiento. Llevo navegando en internet desde que tengo 8 años.
Diariamente el objeto que más consulto es mi móvil y paso múltiples horas diarias delante de una pantalla ya sea trabajando, viendo series o películas, escuchando música, jugando a videojuegos o consultando la actualidad.  Internet es para mí, un medio de vida, más que una herramienta.

Y yo no soy nadie especial. Todo el mundo suele jugar a videojuegos en su móvil u ordenador ya. Al menos, las generaciones más jóvenes. ¿Quién no tiene en su casa Netflix, HBO o Amazon Prime Video? ¿En vuestras casas se sigue comprando el periódico, o consultamos las páginas web de los mismos para informarnos? ¿Seguís viendo la Televisión u os habéis pasado al streaming?

Algunas personas demonizan estas herramientas como si causasen todo tipo de males a la sociedad. Que se ha vuelto individualista y que hace que todo el mundo esté a sus cosas, sólo pendiente de su móvil y sus redes sociales... Pero esta tendencia existe desde antes de twitter, whatsapp o facebook. La sociedad es individualista porque se educa a la población en la competición y en supeditar las necesidades del resto a nuestros deseos. No es responsabilidad de los teléfonos móviles y las redes sociales.

No estoy diciendo que las TIC no puedan ser peligrosas, ni mucho menos. Pueden causar problemas de visión: Pero hay maneras de ejecutar un uso responsable al respecto.
Pueden provocar problemas de aislamiento: Sí, pero también ayudan a socializar a personas que no tienen un don natural para ello. Y aún así, se puede prevenir el aislamiento y abordarlo.

Tenemos que empezar a ver las TIC cómo un hecho revolucionario que cambiará nuestras vidas para siempre. Pero eso no es malo. Ni debe darnos miedo. Debemos simplemente plantearnos como sociedad qué cambios estamos dispuestos a asumir, y cuáles queremos combatir.